Examinaremos tres maneras en las que estas tecnologías de próxima generación pueden hacer que sus aplicaciones logísticas sean más eficientes.

1. Los robots aceleran el proceso.

Se han hecho grandes avances en el desarrollo de robots colaborativos que pueden trabajar estrechamente con las personas. Los cobots proporcionan asistencia versátil y escalable a los trabajadores de almacenes mediante la automatización de tareas repetitivas, como utilizar palés. También reducen los costos minimizando la posibilidad de errores humanos.

Los cobots tienen una fácil integración y un impacto mínimo en la infraestructura existente (a diferencia de los robots industriales, que se deben aislar en jaulas debido a problemas de seguridad). Además, los cobots como los de la serie TM de Omron son fáciles de programar, mientras que los robots industriales a menudo requieren altos niveles de experiencia especializada.

Los robots móviles autónomos, como la serie LD y la serie HD 1500, también son una excelente opción para acelerar los procesos en las operaciones de logística en las que una persona camina mucho, como las operaciones de “recogida para el pedido”. Los AMR pueden servir como servicios de mensajería que llevan los artículos de la estación de recolección a las ubicaciones de empaque, lo que reduce los viajes innecesarios en todo el almacén (conocidos como “desechos de movimiento”).

Mediante la automatización de tareas manuales con cobots y AMR, puede mejorar la satisfacción de los empleados y mantener los resultados entre la escasez de trabajadores. Estos robots pueden realizar tareas aburridas y sencillas, mientras que sus empleados se centran en actividades que utilizan más creatividad.

2. Los robots maximizan la utilización del espacio y la flexibilidad.

Si las inquietudes sobre el espacio del piso le están provocando retrasos respecto de la transición a la robótica, puede que le sorprenda saber que muchas soluciones robóticas ayuden a maximizar el uso del espacio. Esto es particularmente cierto para los robots móviles autónomos, que utilizan software de navegación a bordo para mover cargas a través de entornos dinámicos y con grupos de personas.

Debido a que los robots móviles autónomos permiten configuraciones de piso mucho más dinámicas en relación con los sistemas transportadores, se adaptan fácilmente a cualquier plano de piso. Gracias a su flexibilidad, garantizan una nueva implementación sencilla para cualquier cambio de diseño de almacén que no se pueda realizar fácilmente con automatización fija. La serie LD AMR ofrece el software Mobile Planner, diseñado para ver y controlar una flota móvil desde un dispositivo móvil o una tableta.

Suponiendo que hay suficiente espacio físico para que los AMR naveguen, se pueden adaptar a casi cualquier entorno. La infraestructura existente puede permanecer en su lugar o incluso reducirse (ya que los AMR pueden reemplazar los sistemas de transporte estático). Los flujos de trabajo especiales se pueden implementar rápidamente de manera simple mediante la asignación de una nueva ruta o tarea.

3. Los robots mejoran la seguridad.

Muchas instalaciones de logística dependen en gran medida de los montacargas. Aunque son eficaces para mover palés y otros artículos sumamente pesados, los montacargas también plantean problemas de seguridad, en especial cuando son operados por empleados sin capacitación especial. Muchas tareas que los montacargas ejecutan normalmente se pueden pasar a los AMR, lo que puede mejorar las condiciones de seguridad.

Los AMR tienen lectores láser incorporados con clasificación de seguridad y están programados con una configuración de seguridad que evita colisiones con obstáculos (incluidos los seres humanos). Como resultado, los robots pueden operar cerca de trabajadores humanos y otros equipos con un riesgo mucho menor de lesiones o daños.

¿Le interesa aprender más sobre las oportunidades de tener robots en instalaciones de logística?