Un fabricante multinacional contratado de dispositivos médicos descubrió que su proceso de inspección de etiquetas, que se realizaba, en gran medida, de forma manual, se estaba convirtiendo en algo inmanejable debido a la necesidad de cambiar fácilmente las líneas de fabricación en varias instalaciones. La empresa necesitaba una mejor manera de mantener la precisión a medida que la demanda aumentaba.

El cliente se comunicó con Omron para obtener una solución que mejorara la rapidez y consistencia del etiquetado en todas sus instalaciones. Omron respondió con la oferta del sistema LVS-7510 con especificaciones que se ajustaron a las necesidades exactas del cliente. Veamos por qué esta solución fue óptima.

1. Realiza la clasificación de calidad de los códigos de barras con bastante precisión.

La norma UDI de la FDA requiere que los códigos de barras cuenten con un umbral de calidad determinado para garantizar su legibilidad en toda la cadena de suministro. No basta solo con validar que un lector de código de barras determinado puede decodificar un símbolo. El LVS-7510 verifica que los códigos de barras cumplan con una amplia variedad de criterios de calidad, que incluyen un alto contraste, menos imperfecciones y más.

2. Cuenta con una impresora integrada. 

Omron trabajó con Zebra, fabricante líder de impresoras a nivel mundial, para garantizar la compatibilidad con las impresoras térmicas de la empresa. Actualmente, es el único sistema con una impresora integrada de Zebra que produce todas las etiquetas en conformidad con las normas ISO y GS1.

3. Facilita la verificación de etiquetas.

El LVS-7510 crea plantillas para cada formato de etiqueta necesario, para luego guardarlas en la nube y acceder a ellas en todas las instalaciones. Esto ayuda a que las transiciones de una instalación a otra fluyan sin problemas y garantiza que cada etiqueta producida cumpla con un estándar global creado por un equipo de expertos en estas normas.