Dejar estos requisitos en las manos de los trabajadores humanos es engorroso e ineficiente, pero tampoco es lo ideal automatizar el proceso con vehículos guiados autónomos (AGV, del inglés Autonomous Guided Vehicles) tradicionales que requieren modificaciones costosas y que necesitan demasiado espacio en la fábrica.

Aquí entra en juego el robot móvil serie LD de Omron, también conocido como un vehículo inteligente autónomo (AIV, del inglés Autonomous Intelligent Vehicle). Estos robots son la solución ideal para las necesidades de transporte de materiales delicados, ya que son capaces de navegar de forma autónoma a través de entornos dinámicos y con personas presentes. A continuación, se presentan algunas de las principales razones por las que los AIV son la mejor opción para su instalación.

1. Los AIV ahorran espacio. 

Debido a que los robots móviles LD no pueden evitar recorrer caminos específicos dentro de una planta, ayudan a reducir la congestión logística de fabricación al desplazarse unos alrededor de otros de forma mucho más eficaz que los AGV.

Los AGV generalmente requieren “áreas de evacuación” especiales configuradas por cinta magnética para pasarse entre sí, mientras que los AIV no necesitan nada parecido. Esto significa que los AIV funcionan de manera más eficaz en espacios estrechos y ayudan a maximizar la utilización del espacio.

2. Los AIV reducen los costos de instalación.

Los robots móviles Omron pueden utilizar una opción de localización avanzada, conocida como agudeza sensorial; además, tienen láseres incorporados para encontrar la mejor ruta hacia su destino. La agudeza sensorial identifica los plafones y superpone los “mapas de luces” con el “mapa de los pisos”. También permite que los robots se muevan fácilmente por las zonas abiertas en grandes almacenes.

Sin necesidad de realizar modificaciones en la fábrica, como instalar imanes en el suelo o balizas de navegación, su implementación ahorra hasta un 15 % de los costos de despliegue en comparación con otras estrategias de transporte.

3. Los AIV mejoran la trazabilidad.

Los robots móviles Omron ayudan a mejorar la trazabilidad del flujo de materiales, ya que pueden capturar datos en tiempo real durante el proceso. Cada vez que se asigna un trabajo a un determinado robot, este evento se refleja en el sistema y también se realiza un seguimiento de los movimientos del robot. Esto también ayuda a los clientes a optimizar sus procesos y el rendimiento.

4. Los AIV optimizan la fuerza de trabajo.

Como se encarga de tareas repetitivas y propensas a tener errores, los robots de navegación automática reducen la probabilidad de errores y permiten que la fuerza de trabajo se enfoque en desempeñar actividades que requieren ingenio humano. Esto disminuye los requisitos de capacitación y ayuda a generar una mayor satisfacción de los empleados.

Los AIV también ayudan a mantener las plantas de fabricación de semiconductores libres de contaminación, ya que garantizan que los empleados solo ingresen a las áreas en las que realmente se necesitan sus capacidades. Debido a que la contaminación es una preocupación fundamental en el negocio de los semiconductores, la solución AIV ofrece ventajas importantes.

5. Los AIV mejoran la seguridad.

Los AIV ayudan a evitar accidentes laborales, como colisiones y distensión muscular debido al levantamiento de objetos pesados. El mantenimiento de las máquinas pulverizadoras, por ejemplo, implica el contacto directo con el interior del equipo y conlleva riesgos como descargas eléctricas, pellizcos y lesiones en la espalda. Mediante la automatización del transporte de materiales, los trabajadores ya no deben lidiar con estos peligros.